Este viaje se hará a lomo de preguntas. Serán el vehículo de este viaje sin destino. Un creyente, para serlo auténticamente, lo cuestiona todo. Por eso alguien dijo que la alternativa a creer en Dios no es el “no creer”, sino el creer en cualquier cosa. Asumiremos el mandamiento bíblico de cuestionar. Sobre los cimientos de siempre construiremos una edificación propia.

Al recorrer La Senda Criolla a falta de guía y de destino, habrá compañeros de viaje; aquellos que como usted quieran compartir con generosidad lo que no les cuadra o lo que piensan que podría ser diferente. Aquellos que como Chespirito no piensan en la historia como fue, sino en como pudo haber sido.

Reciba usted una invitación amable a caminar.